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2014-08-22 21:41:06

Mago de consolas

Jaime Moya Herrera

Impecable, siempre de terno y corbata a tono, Jaime Oswaldo Moya Herrera no parecía un productor de radio sino un mago.Era un prestidigitador que con solo mover las perillas y los controles de una consola lograba los efectos más realistas, que hacían que los oyentes se mueran del miedo o estallen de felicidad cuando escuchaban las radionovelas o radioteatros que presentaba Radio Quito, que cumple sus primeros 74 años en el aire.

Este quiteño, nacido el 5 de junio de 1934 en la Loma Grande, pasó los últimos 35 de sus más de 50 años como radiodifusor en la Voz de la Capital.

En ella formó un trío invencible con Érika von Lippke y Gustavo Cevallos.

Es más, su vida estuvo ligada a la de la estación desde que, siendo aún guambra, desoyó a sus padres y se fue a ver cómo sus coterráneos incendiaban la radio por culpa de su radioteatro 'La guerra de los mundos'.

Llegó cuando todo era ceniza, pero el episodio encendió su vocación. La familia Granda acabó por enrumbarle hacia las ondas hertzianas.

Como quedó huérfano, Edmundo Granda le llevaba a jugar fútbol y, también, a la radio Luz de América, donde trabajaba.

Un día le dejaron al mando de las grabadoras (en ese tiempo casi tan grandes como llantas de carro) y se desenvolvió con suficiencia. Eso gustó al padre Dávila, encargado de la estación, y se quedó.

Fue el comienzo de una trayectoria llena de éxitos. Pasó a Gran Colombia, luego a Radio Nacional para, finalmente recalar en la Voz de la Capital. Su porte de dandy siempre le abrió puertas y llenó su vida de anécdotas.

Recuerda la que pasó en el Hotel Colón. Pensaba amenizar un evento y terminó 'tocando' el bajo de la orquesta Salgado Jr., ya que el titular faltó. Y sin que nadie se diera cuenta que solo amagaba.

Su larga trayectoria le ha dejado muchos amigos (varios famosos) y algunas generaciones de alumnos agradecidos. Se jubiló en 1977 pero siempre vive con la oreja pegada a su pasión: la radio.Nació en Quito en 1934.

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